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Poemas de Diana Poblet (Río Negro-CABA)
07.04.2014 05:32 |
de... Poemas |
EL SOBREVIVIENTE
Ellas marcharon por última vez
secaron espinas de sus pies llenos de Plaza
maratón impostergable de los jueves
lo buscado aún no regresa
tal vez se encuentre bajo tierra o al fondo del mar
tal vez no existe solaz ni cielo
sólo una tregua
pañuelo blanco desplegado
bandera de mi país
alumbrando el grito silencioso
la búsqueda del retoño
la palabra sin mordaza
sin capucha comenzó a gatear la justicia
probando equilibrio nos pusimos de pie.
Con unas Madres desconocidas y locas
aprendimos cómo se camina desde la Plaza de Mayo.
Jamás importó el frío la lluvia ni el miedo
el desafío era no olvidar.
Y está ileso.
ABEDUL
Qué hojarasca escribe esta mujer celta,
mirando el prurito trémulo del otoño
desnuda de viento y barcos
acude a este concierto de silencios
entorpece mi tristeza y pule la risa
esta mujer celta y su rastro de sirena ignota
si quedasen niños aquí
en esta esquina de papel
jamás se entornarían mis soles.
La mujer celta conversa de nuestro otoño
ella y su voz de gaita
su consonancia de Templo
aligera su morral de bosque
extravía contraseñas
quiebra llaves y puertas
sabia es la mano que se atrevió a desposar el silencio
llaga de los arcanos
piedra custodia que desalambró su ira.
La mujer celta
aloja sombras en una muralla de mi casa
y aún desde ahí, puede alumbrar.
EL HÉROE
Todo queda circunscrito a la ausencia
un listado de humo tose la tarde
la elipsis es lenguaje
de original belleza cinética.
Existió en mi silencio
un espacio en blanco
adonde todas las palabras
fueron posibles.
POR ALGO SERÁ, BEATRIZ
Por algo habrás llegado hoy
tanto viaje en carne despielada
tanto desabrazo de silencios
tanta mano añorándote
por algo habrás llegado hoy
lanzando hacia mis dedos
un tatuaje de ojos claros
que me sonríe en el Aula Magna
por algo te llevo a resguardo de angustias
en esta caja sagrada que contiene
lo mejor de mí
a salvo de humedad
prohibido de lágrima.
Porque alguien debería escribirlo
quedé con esta pluma estremecida
y vos con tu palabra quieta.
Amiga de alma presente
que amanece y sopla poemas
despabila lunas
fantasma azul
glacial y descalzo.
Que tiemblen
ante
mi amazona herida.
Ella no amainará
y decreta Justicia.
Por algo será.
SUBLIMACIÓN EN VILO
Y éste arrastrar los pies estando muerta
y éste desconocer tu latido
y éste ahogo que asfixia
con asfixia que no mata
y éste vagar sin sensaciones
con el dolor atomizado en todo el cuerpo
para nunca saber cuándo se acaba
perder expectativas de que acabe
y ese transformarse de ésta tinta
en patética sangre de palabras
en desfile de productos necesarios
para ni recordar lo que hacía falta
éste no tener ser ni tener alma
y evidenciar el riesgo insospechado
de que infiltraras líneas de batalla
Ese obligarme a continuar sobreviviendo
para encontrarme igual muerta en la mañana
ese irrumpir constante de fantasmas
blandiendo metafísica ignorada
y ese asalto permanente de tu sombra
(que no se cede)
a violarme de continuo la mirada
y ese temblor clavado aquí, en mis manos
y esta locura transitoria
y ese velar sin muertos, permanente
y éste perder en sí la referencia
de adónde empieza todo cuando acaba
Y ésta horrible sensación de despedida
cuando sospecho haber salteado la llegada
y ése probar mentirme que se pasa
para morir de pie
como los árboles
inaugurando
una vegetación de sangre y llama.
NOSOTROS
El día después de la consigna
acarrear el frío y jugar solitario con el café
ver la plaza y su gente dormida de intemperie
un subte colapsado de apurones
micros y frenadas sicodélicas
palomas enamoradizas
estudiantes que no estudian
viejos sentados que ya no esperan nada
y yo que aún retengo el asombro
por inusual
absurdo,
milagroso,
muchedumbre que entibió los ojos
recordar el bolsillo y hurgarlo sin prisa
un pasaje, una foto digital, un tríptico
ahí están
otra vez todos, los llevo,
aún no se han ido.
DETALLES - DEL LIBRO DESDE LA RAÍZ
Detalles I
Es la soledad
esa multitud amordazada
que habita a la izquierda de mí
y te llama sin nombre
en esta ciudad que bulle
desconocida
y feroz.
II
Es la soledad
último artilugio
piedra nómada
claridad inútil
cuando será tu ausencia
todo el caos.
III
En paréntesis de silencio
escribo
ausente a la cita
predico soles
extraviado el avatar
huérfana la estrella
que ovacionó tu nombre
torero sin arena
FEMINISMO DE FORMA
Llevo una guitarra mujer sobre la espalda
sugerente de dunas
no es de cedro ni de álamo
es de simbiosis sencilla
sólo recuerda que era guitarra
cuando alguien la abraza
y tiemblo en su diapasón.
6 DE ENERO 2012
Hoy me levanté y los reyes magos habían dejado dos ausencias dentro de mis zapatos,
los saqué al patio a rellenarlos de sol para que no se humedezcan.
No hay algo más grave que una ausencia enmohecida.
DESDE MI PAZ
Abierto el cajón del silencio
llueve certeza al final de los ojos
creen que no se oye,
el fósforo lejos de la mecha.
Colecciono pétalos inoxidables
se abren ventanas
la montaña fue respuesta
el viento se arroja sin espalda
en marcha la caballería y el apocalipsis blindado
volutas azules descubren al árbol
ya se alambró con muérdago esta casa
el silencio es una palabra de verdad definitiva
y el crepúsculo no existe
la certeza clarea sin soles
luz propia poseía el camino
no hubo linternas ni faro
sin luminosidad se quebró el frasco de luciérnagas
y concluyó la noche.
Era tu mano
el único bastón blanco.
HAIKU 1 - TRONADOR
Qué será de mi
estruendosa tristeza
sin tu silencio
ENNEBLINADOS
I
Al callar
fue el parlante del silencio
lo ensordecedor.
II
Será esa esquina
la eterna culpable
anónima absurda
indiferente a la llaga que tajea
y al cruzarla,
ensombrece.
III
Con sensualidad de bruma
posar para el dolor
desnudo perfecto
espera del zaguán sin regreso
nadie asoma palabras
ni destruye
la opaca necedad de tu ausencia.
IV
Encontrar la grieta del tiempo
volar desde sus ojos
amplificar el silencio
hasta quebrar
tempestad
abismo
marejada
intentar ser pájaro.
ESA ESPECIE DE TAJO
Eres el que descuartizó la noche
por azotar la playa inalcanzable
en brutal cosecha de cegueras
lejana tempestad antártica
pájaro que enmudeció de ira
y petrificó su rama en el pinar
soliloquio de silencios que deshojó el arce
trémula rosa amarilla en lo escrito
lágrima reseca de adiós.
Eres el que sublevó al grito
y quebró la fragilidad del instante.
Blasón de luz y filo.
LA GUARDIANA
Indómita mi palabra
si titila una esperanza
indómita
a contraviento
a contracauce
a contramano
palabra contravencional
insurrecta
humanizando
días inciertos.
Desoyendo bestias
y cañones.
DECLARACIÓN
Cuando sonreí
debí decir que te amaba
pero ocurrió todo aquello
casi graniza y al final fue sólo llovizna
cayó el muro que no era de Berlín
se derrumbó un murallón de silencio
un pájaro anidó en la estatua de Mariano Moreno
de tu mano brotó una pluma
tu boca abrió las compuertas del olvido
las bombas de Irak continuaron cayendo
los niños pedían monedas
crucé un gato no tan negro
una columna de piqueteros con banderas
y dos perros del baldío
perdí el 60 por incredulidad
tu banco insistía en solitario
el lustrabotas perfumó la tarde con betún
tu voz sugirió un no importa
mi palabra pulsó el silenciador
grotesca me atraganté con letras sin sonido
en ese momento no se movía ni una hoja
fue imperceptible la mirada empañada
ese limpiaparabrisas del ojo
y cuando apenas sonreí
quise decir que te amaba.
LA BRASA
Amanece, ensíllenme el caballo.
José Gervasio de Artigas
(Palabras en su lecho de muerte)
Trenzo pueblo y octubre
y la imagen con fondo negro ardió,
incendió mis ojos.
El caprichoso se ha marchado
nos sorprende la mañana
del día después
el qué vamos a hacer y su escalofrío
en un dolor poblado de Plaza y banderas
una compañía de lágrimas en el Censo de la década,
con más tristeza que habitantes
miradas que abrazaron la ceniza del llanto
Fui una soledad acompañada
creí que estallaría el alud del silencio por la Avenida de Mayo
nadie hablaba
sólo caminaban por el medio de la calle.
Fuimos el pueblo ensombrecido
sólo nuestros pasos
por televisión informaban que llegaría mañana
no quisimos que Ella estuviese sola
y el viento del sur ya habitaba en Buenos Aires.
Aquella noche me adormecí imaginando
¿qué haría con éste dolor genuino
ahumado en hileras de velas blancas?
Y tomé la poesía inconclusa para encenderla aquí,
en esta esquina de papel y mármol .
Pedí
que no se apagase la lucha de los desheredados
de los manos cuarteadas
de los esperanzas sin motivo
de los que ni veríamos en las pantallas,
ni tenían cámaras
para fotografiar un dolor tan igualitario.
Con ellos compartí el inabarcable silencio de la espera
en un traspié de la historia adonde el dolor nos tatuó la fe.
Mansa comenzó la garúa que ya se vislumbraba
Y con el aguacero pasó Néstor y su certeza
más que a despedirse
volvió a despertarnos
Vamos a andar
que aquí no hay ningún muerto
es pueblada su fortaleza invisible.
Él será el fantasma que no equivoque rumbos
junto a ese fantasma marchará
Latinoamérica
y su brasa encendida.
En esa lumbre
más que llorarlo,
vamos a andar
y arderá inextinguible.
Heredamos un sueño.
PARQUE LEZAMA
Rozar el espacio entre la nube y el ojo
incrustar esplendor en lo profundo
permanecer ajenos un sábado cualquiera,
habitarnos desolados
trepar la tarde desde viejos troncos
caber en la fragilidad
en el instante sutil que posee la transparencia de la gota
lejos, y amortajada la bestialidad del noticiero
sin que llegue a demoler la acidules de su palabra
libertario nuestro ojo rasga los cielos, toma carrera
sin detenerse en los brotes del ramaje
empina la rugosidad de las tipas amarillas
cambia de árbol y embiste
repleto de asombro
secuestra todo el silencio de este banco
conecta al Universo sin redes ni telefónicas.
Yo Soy,
esa quietud sin nombre.
SALDO FINAL
Yo decía que no. Que no.
Que no sería posible porque
uno viene de otro lado
de una ladera oculta de la prosa
ahí, adonde Julio rayuelea
ahí,
en el insomnio adonde los inviernos sobreviven en bollos de papel
en una máquina de escribir vieja que siempre desespera,
en la tecla M que funciona a veces pero fue arreglada por mi padre y
el detalle provoca a escribir sin fundamentos.
Y de pronto surge este espacio de palabras palabritas y palabrotas,
con ese jaque anacrónico, heredado, postizo, incómodo.
Ese calor de pies, de andariegos, de hacer la calle porque sí
ó porque no. O porque se puede. O porque se siga pudiendo.
Para la Historia no existen tiempos ni manos ni brazos
y de pronto todos pensaron lo mismo y hubo.
Y la máquina sigue ahí, en su silencio cómplice
ahora, cuando yo quiero que explote y llueva prosa,
que sea fronda y avenida, que acantile, que bosquee, que sulfure y brame
que ruja que fluya que integre y denuncie.
Que diga cuándo, en qué momento asumo el desafío tardío.
Y es grave:
finalmente, luego de negarlo por años
creo que soy poeta
porque me duele el lugar
adonde llevo al Pueblo.
0 KM
Tal vez ya no hay versos
huyeron ante la magnitud del rayo
y la brisa fue pantera
o el destino una caja de cultrum
tal vez los poetas envasen suspiros
para vender en Plaza Francia
a precio de bagatelas
por no estafar pasados
ni apostar futuros
ahora que este día viene tan nuevo
tan sin huella
y la lágrima ya no recuerda
el sendero pardo del ojo.
YO SOY
Me dejó un ramo de flores amarillas
y ese tajo de recuerdo.
Sólo letras que perfuman
este frío,
esta ceguera por no oír
este silencio de dios.
ASÍ
Como si nada,
como cruza el viento por los abedules
o galopa la hora bajo el áncora del reloj
incapaz de recordar la herida ni el perfume.
Como el último calor del leño antes de apagarse
con su crepitar mustio
casi
como si lo hubiese imaginado.
Tifón de tormentosa espera.
Lasitud de lago quieto.
Has pasado.
DENUNCIA
Soy la que amó para siempre
y murió cuando marchaste
la que de tanto matarte terminó creyéndolo
soy la que mintió que no amaba
burlándose a sí misma
la que infatigable apuñaló tu recuerdo
la misma que lloró de risa
cuando te nombraban
y hoy inaugura tumbas imaginarias
adonde llevarte jazmines.
IRREFLEXIONES
Te guardaré entre las cosas que no tienen nombre
junto a los secretos (que no se le cuentan ni a la almohada),
los que pierden sus pétalos antes de tiempo
los que arrancan sádicamente alas de mariposas
los que anudan la garganta pero habiendo soga de sobra
(por no colgarnos con el excedente)
lo rematamos en poema.
Te guardaré para juzgarme falible
recordando usar anteojos cuando crea ver el mar
para que sea un mar legítimo,
no sólo mi ansiedad concibiendo utopías
diseñando en la nada más absoluta
con inaudita capacidad poética
esculpiendo sobre cloacas
espectaculares crepúsculos naranjas.
Te guardaré
entre las cosas que no tienen nombre
para no inmortalizarte en palabras
que use a diario.
TERQUEDAD
Como decirles este tango hablado
en la plaza hay quietud de pájaros
las palomas fugaron a otra aldea
el viento arde amenazante
será la guerra
los diarios sufren de incontinencia
las gentes pasan sin pensar
creen que el alma no duele,
sólo está ausente. Ni siquiera rota
allá, en el umbral de Palestina
adonde se perdió el humano
la raza la rosa la risa la runa el rezo
ante la punzante indiferencia
ajeno tiembla el Universo que aún resiste,
no podríamos ser tan suicidas.
O sí. Y sólo se postergó el matarnos.
Sentados vimos la muerte que avanzaba
sexy, de impecable y anoréxico negro
perfumada de plagas vació nuestros ojos.
Ya no serán necesarios. No sirvieron para ver el genocidio.
Ahora que enero es tristeza
y los fuegos artificiales fueron fósforo blanco
alarido
pavor.
FEBRERO Y 2009
Domar el brinco que frecuenta el silencio
devolverlo en llamarada
aquietar los miedos, ese hospicio interno
entregar este fajo de locuras responsables
asumir sin búsquedas la verdad que vive en lo invisible
lo que no dirán los diarios ni la gente
la tristeza irreparable que posee la muerte de un niño.
La partitura inexacta que bombardea lejana
combate en huesos ajenos, acallados,
sin grito cae la frase endeble
la palabrota barata, la última,
la inexacta,
tal vez dios, tal vez mamá,
quién sabe cuál palabra será la más enorme
para sujetar todo el miedo.
Amarrarlo, que no caiga ni encharque
que ni salpique
este silencio en llamaradas.
LA CORRIDA
Mido la geografía de tu ausencia
tomo huellas dactilares a la palabra
viajo al origen insinuado
cuestiono cuánta lentejuela falta
para concluir aquel traje de luces
torero desconocido
que caminas por mi arena
sin toro y sin espada.
AMÉ RICA AMÉ POBRE
Susurra en el tiempo
ingresando con insistencia de niño
comienza sus contracciones
interrumpe mi sueño con alucinación y grito
para cobijarme selva y amazonas.
América,
cómo dueles en la india que llevo adentro
y agazapada resiste tus dolores de parto
balbuceando idiomas foráneos
quiebra lanzas con el futuro.
Dicen,
que mis abuelos llegaron de otras tierras
de vetustos mausoleos
apenas pude verlos, ellos y yo estábamos aquí,
de pie, sobre esta tierra bendita
cuya raíz cuadrada es la ignominia a la enésima
los andrajos,
las manos callosas,
la esperanza mortificando rodillas ante dioses importados
que concedieron riqueza de intemperie.
Esa Historia que alambró campos con tablas de dividir
mientras hoy, a los palos, aprendemos las de multiplicar
Resistiendo,
con terquedad en la memoria.
Para elevarnos desnudos ante el grito
¡devuelvan nuestra América!
la indómita,
la que carga sus hijos en la espalda,
devuelvan nuestra América
la íntegra,
que desconoce Nortes,
América,
la del Sur,
con cruz hasta en sus estrellas,
verde y blanca, pampa y cordillera
devuelvan nuestra América,
es hora de todos los partos,
mi lanza, está rota,
y mi palabra,
entera.
Diana Poblet. Nació el 28 de marzo de 1954 en Viedma, provincia de Río Negro, actualmente reside en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Seleccionada para participar en el libro de las Madres de Plaza de Mayo Memoria, Verdad y Justicia a treinta años por los 30000.
En Chile recibió el primer premio de novela otorgado por la Corporación de Las Condes, en Santiago, por “Solo por hoy” , gano el concurso Maité Allamand de Literatura Juvenil, libro editado por Dolmen Ediciones.
Editó su segunda novela “Vivir a prueba”. En Estados Unidos publicaron su poemario Cenizas de Sol y “ El manual del vuelo”.
Fue finalista del Premio de Cuentos Max Aub en España y Juan Rulfo en Francia.