Poemas de Oscar Vicente Conde (Buenos Aires)

DESEO

Quiero
no como un último deseo
eso lo dejo para otro momento

ahora
necesito
un amanecer que me bese la frente
una voz que me arrulle
unos ojos que no dejen de observarme

y las manos eternas me acaricien como antes

quiero volar hasta donde sea necesario
con la piel desnuda

y al final
saber que todo estará bien


INSTANTE

Con la última respiración
de la noche
todas las lunas ciegas
el cansancio de los pájaros

una brisa que pasa inadvertida

los pasos dormidos
mientras alguien dice adiós

con la última respiración
de la noche
todos los ángeles olvidan sus nombres
y ya no visitan las casas que dejaron

una voz que no se puede reconocer

las manos frágiles
las caricias que no llegan

con la última respiración
de la noche
me resisto al olvido que me sepulte

.........

No sé si huir del no
refugiarme dentro del si
o buscar una nube para delirar
pensar que un signo de interrogación
me persigue
una línea sangrante se interpone
en mi camino

o simplemente reconocer que soy extraño

tan extraño
que dejaré de reconocer mi propia identidad


SIMULACRO

Alcen sus manos al unísono
agiten los pañuelos rojos
para despedir a sus muertos
los muertos que van a visitar a otros muertos

no abran sus ojos
así no los verán partir
mientras ellos se despojan de sus pieles

cierren sus bocas con firmeza
no repitan una y mil veces sus nombres
para evitar que regresen con sus culpas

no recen
no prendan sahumerios ni velas
no unten sus puertas con sal
quemen las sillas vacías

y después
con el nuevo día
ustedes se vestirán con ropas coloridas

como si nada hubiera sucedido

.......


Hemos cortado las últimas rodajas de pan
sobre la mesa redonda sin mantel
antes de dejar la casa que ya no habla

recorrimos en silencio los rincones
donde el frío de invierno se adormece
antes que la noche nos sorprenda con su queja

corrimos las cortinas de las ventanas
para disimularlas como si fueran ojos inútiles
pero no cerramos las puertas
ni apagamos las luces
tampoco limpiamos los pisos
por si algún distraído fantasma necesite volver

y partimos
como el viento después de la faena


LA NOCHE

La noche es esa amante furtiva
de piel sedienta
lágrimas escasas

con el aroma de las jornadas veloces

con el gemido que nace

la noche es la turbulencia
el sonido de las alas distantes
un viento a punto de ser huracán

los laberintos
los abismos
el sollozo de las ventanas cerradas

la noche es un túnel ciego
una aventura desconocida
un reproche

el refugio de los fantasmas sin ojos


SEÑAL

El tiempo que falta se ha consumido
como un grito que se apaga
y ellos
los que saben de despedidas confusas
sólo han cegado sus ojos antes del nuevo diluvio

llamaron a la noche por su nombre verdadero
pero no se compadecieron de los expulsados
del reino
no cantaron plegarias a la luna
no clamaron por sus dioses con poderes de antaño
ni tuvieron clemencia por los dementes

se llevaron las cruces que fueron abandonadas
sus manos recogieron los restos de sangre
ocultaron sus deslices

todo se repite como un eco que nunca cesa

bienaventurados los que regresan con sed


REQUISITOS

No es necesario gritar a la luna
para transformarse en lunático
ni correr desnudo sobre el empedrado
para llamar la atención de algunos distraídos

no es necesario ser un asesino serial
para pasar a la historia como un salvador
cantar el evangelio en las plazas
para salvarse de una negra historia

no es necesario buscar excusas extrañas
para olvidar algunas promesas incumplidas
hablar de fantasmas que nunca vieron
convencer a los otros de sus soledades
regalar rosas marchitas
vomitar sobre la mesa recién servida
vociferar el nombre del hombre que se fue
para no volver

no es necesario hurgar en los despojos
para encontrar los sueños que nos hurtaron


NOCTURNO

De repente
sin el aviso necesario
el horizonte se borró en la distancia
se llevó los pasos
y el azul del cielo lloró

sólo un grito tembló en el aire
como una letanía
y no había gargantas para ello

un eco impiadoso
lo repetía como un castigo de los dioses

la noche longeva robó algunos ojos
para mirar a los hombres que buscan refugio

....


Tengo una pregunta que a veces me tortura: estoy loco yo o los locos son los demás.

Albert Einstein (1879-1955) Científico alemán nacionalizado


Los dementes juegan a decir la verdad
bajo coléricas nubes
en una noche amarilla

pero se engañan entre ellos
con mentiras piadosas
se dan las manos como póstuma despedida
y sus ojos sólo ven los que otros no ven

después de todo sus locuras
los aíslan de las corduras que todo corrompen

antes que el día asome con su burlona alegría
los dementes huirán en caballos rojos alados

nosotros
los sensatos
esperaremos por otra oportunidad

antes de ser devorados por el caos


OSCAR VICENTE CONDE. Nació en Lanús, Prov. de Buenos Aires, República Argentina, el 18 de Diciembre de 1947. En poesía ganó el ler. Premio del Concurso Internacional del Centro de Letras y Artes San Telmo y Revista Arlequín del año 2000. En el mismo año editó su 1er. Libro de Poesías: “Destino”.
Obtuvo varias menciones de Honor y participó en diversas antologías. En el año 2009 fue finalista en la 8ª Convergencia Internacional de Cuentos Junín País 2009 evento auspiciado por la Secretaria de Cultura de la Nación, Instituto Cultural del Gobierno de la Provincia de Bs.As, y el Gobierno Local de Junín, donde obtuvo 3ra. Mención Especial del Jurado en Cuento.
Amante de la poesía surrealista de Ricardo Molinari, Aldo Pellegrini, André Breton, Vicente Alexaindre, entre otros. También de la poesía de Oliverio Girondo.
En Noviembre de 2013 se editó y presentó su 2do. Libro de Poesía “Silencios Pintados en la Piel” Ediciones Tahiel. Próximamente será editada la 2da. Edición, con algunos cambios.
En Octubre de 2013 fue finalista en Antología Poética LAIA V “ENSUEÑOS” de LATIN AMERICAN INTERCULTURAL ALLIANCE, NEW YORK,.
Actualmente está en corrección su 3er Libro de Poesías, con fecha probable de edición Abril 2015
Asiduo concurrente a eventos literarios.