Los ex presos tendrán un cupo para trabajar en la UBA

Los consejeros superiores estudiantiles de La Mella - Presidencia FUBA presentaron un proyecto en el máximo órgano de co-gobierno de la UBA para que aquellos estudiantes regulares "que hayan pasado por el Programa UBA XXII y hayan cumplido condena, estén cumpliendo un régimen de libertad condicional, hayan sido condenadas y se encuentren en régimen de semi-libertad o hayan sido procesadas con prisión preventiva por más de un año" cuenten con un cupo para trabajar en la Universidad de Buenos Aires.
Se busca así aplicar el criterio de "discriminación positiva", aplicado también en el cupo femenino del Código Electoral Nacional, o el “Sistema de protección integral de los discapacitados”.
Jonathan Gueler consejero superior de La Mella - Presidencia FUBA precisó que "este se trata de un paso muy importante para muchos de los estudiantes del programa UBA XXII de educación en cárceles que recuperan su libertad y se encuentran en una situación de total desamparo, cayendo en muchas oportunidades nuevamente en manos del sistema penal".
Adrián Lutvak, presidente de la FUBA refirió que "concebimos a los Centros Universitarios de Devoto y Ezeiza como espacios de resistencia frente a la sistemática degradación de los sujetos que produce la cárcel". Asimismo, declaró que "vamos a iniciar una campaña para sumar el apoyo de organizaciones políticas y de Derechos Humanos, así como de distintos colectivos de presos y ex presos para que este proyecto sea aprobado en la próxima sesión".