Reflexiones sobre la fallida sesión para tratar los tarifazos. Por Alejandra Rodenas

Hoy, la Cámara de Diputados de la Nación, ha expuesto su cara más egoísta y autoritaria con maniobras que reflejan lo peor de la política. Sólo la falta de 1 (un) Diputado nos separó de la posibilidad de poder debatir para encontrar una solución a un problema que afecta diariamente a millones de familias argentinas cuyas facturas de servicios públicos resultan impagables.

Es un momento límite: los funcionarios de Cambiemos deben entender de una vez y para siempre que no todo se resuelve aplicando la lógica del mercado. Así lo establece nuestra Constitución Nacional en el art 42: "los consumidores y usuarios de bienes y servicios tienen derecho a la protección de sus intereses económicos". El estado debe asegurar la certeza, previsibilidad, gradualidad y razonabilidad en el cobro de las tarifas.

Una política económica que se sostiene en base al endeudamiento y al aumento de tarifas no es caprichosa ni producto de la impericia: es, lisa y llanamente, una decisión de gobierno. Cambiemos aumenta el costo de vida para favorecer a sectores concentrados de la economía: grandes exportadores, mineras, sector financiero, etc.

Es aquí, en el Congreso de la Nación, donde debemos poner blanco sobre negro para que la población, aturdida muchas veces por algunos medios de comunicación que desvirtúan el sentido de estas políticas, comprenda el verdadero significado de lo que representa estar sometidos a un modelo neo liberal en lo político y en lo económico, que ajusta sobre los débiles y defiende a los poderosos.