La fusión de las letras y la música matancera se hacen presente con Palabras en Concierto- Norma Ester Montenegro

Fue miembro de La Asociación Literaria “La Besana de Villa Luzuriaga”

Durante 15 años formó parte del “Grupo Literario Reencuentro” con Héctor Lema en la Academia Porteña del Lunfardo.

Pertenece a La Asociación Escritores Tradicionalistas de La Plata.

Integrante de Las Perlas del Tango de Claudio Antonio Durán.

Distinguida con La Orden del Buzón otorgada por el Museo Manoblanca de Pompeya, 2011.

Participó en 9 (nueve) Antologías por premiación, entre ellas 1 (una), en España.

Su tema Pena de Luna”, (candombe) fue grabado en suiza por el Dúo Tierra y Semilla.

    Este poemario  es un perfumero que despide dos palabras duende y cautiva, son como ráfagas que impregnan la atmósfera de la voz poética. Una voz poética en un peregrinaje abrasada  a la canción; construyendo una suma de versos o eslabones libertarios y denunciantes como también amorosos y nostálgicos.

Estamos ante la presencia de un concierto íntimo de vivencias, recuerdos, contemplaciones, reflejos. El verso libertario aulla en los cautivos y retumba como un eco en cada estrofa. Estrofas como ventanas metafóricas dando lugar a enigmas, soledades, promesas y despojos, rescatando al olvidado, a lamujer, al borrado.

Cada poema constituye una melodía resonando en el espacio de su pueblo natal como en el espacio arrabalero y citadino. Es el mismo poema que va dejando huellas, singulares aromas, en las inmensidades del paisaje sea éste abierto o cerrado; campo o conventillo.

Sin dudas una gran invitación.

“El tango y yo”

“ Yo sé que fue tu son

un duende vestido de arrabal

compinche de mi amor

en noches de olvido y soledad”

 
“Peregrino del tango”

 “Una huella florida eslabón del recuerdo

va dejando en la pista su cálido reflejo”

“Hermano aborigen”

 “A la vera del camino

formas parte del paisaje,

amparado en el coraje

de soportar tu destino.”

Pedro Chappa y “los rescates”

Al costado del camino

“Fábula niña”

                             “…Hay una niña en rojo y negro esperando tener el tamaño adecuado que le permita reunirse con el único ser de arrullos que, teniéndola a su merced, no la ha lastimado…”