"Desde el Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón estamos pensando siempre cómo contar lo que se va investigando y las diferentes maneras de hacer una exposición", señala el curador de la muestra iniciada el viernes, Gabriel Miremont.
Cuenta que "el año pasado se presentó un libro sobre la Constitución de 1949 donde se hablaba de los derechos que aportó el peronismo. Uno de ellos es el derecho al descanso. En el 45, Perón presentó un decreto que luego se transformó en ley".
Explica el curador que "nos pareció interesante contar que las vacaciones no son sólo un anhelo sino un derecho y que tienen un respaldo legal y jurídico. Desde las distintas áreas del Instituto aportamos para conformar una exposición en la que se pueden ver fotografías, objetos, documentos, diarios, videos, incluso hay dos trajes de baño que fueron de Eva Perón".
Y continúa: "Nos pareció divertido e interesante hablar del veraneo en la ciudad, mostrar cómo se trata de un derecho de los trabajadores y una obligación de quien te contrata darte días y que sean días pagos. Uno tiene derecho al trabajo y también derecho al descanso".
Lo que hizo el peronismo, subraya Miremont, "fue protejer al trabajador en todos sus aspectos, desde lo sindical, las mejoras en los espacios laborales y también el bienestar en el período de vacaciones. No fue solamente poner una ley, fue ejecutar políticas para que se transforme en una realidad".
Entre las políticas vacacionales del peronismo, enumera, se destacan haber creado "más hoteles, más micros, más rutas, más trenes, más hospitales, más aeropuertos, incluso había un slogan que decía: usted paga el pasaje, nosotros pagamos la estadía".
"No dejarlo en un enunciado, sino llevarlo a la práctica y que sea verdadero. Uno puede ver la ropa que le entregaban a los chicos para que puedan disfrutar en la playa, por ejemplo".
Según el curador, "la muestra intenta contar a la gente que el peronismo no sólo se ocupa del trabajo sino también del descanso. Eso hace, además, que después vuelvas al trabajo mejor, porque, en definitiva, el trabajador es quien mueve a la sociedad".
"Las vacaciones son un interés del Estado, igual que el aguinaldo, las seguridad social, la jubilación, cosas que uno tiene incorporadas en la cotidianeidad -sustuvo-, pero al comienzo hubo alguien que lo pensó y un grupo de gente que trabajó por hacerlo realidad. Primero fue un decreto y después una ley".
"Mostrarle esto a la gente en un formato exposición nos parecía un poco más ágil que presentarlo a través de investigaciones que, de todas formas, el Instituto genera en diversos textos. La idea no es que solo vengan, sino que la gente vuelva", consideró.
Proximamente, contó el curador, "pensamos trabajar con todos los derechos: la educación, la salud, la seguridad, todo lo que incluye la Constitución del 49. Todo lo que venimos investigando en el Instituto, el Museo nos permite mostrarlo de una manera más rápida".
Juguetes, ropa, objetos, videos, sonidos ambiente, gráficas oficiales, pinturas y fotografías de época son algunas de las cosas que el visitante puede apreciar en la planta baja del Museo de Lafinur 2988, en una muestra que instala el imaginario de las políticas inclusivas para los trabajadores y que se podrá visitar hasta el próximo 14 de marzo.
La ciudad de Mar del Plata y la provincia de Córdoba se convirtieron en un verdadero ejemplo de esas transformaciones, llegando a triplicar la cantidad de turistas arribados entre 1940 y 1955.
Hoteles provinciales, hoteles sindicales, pasajes económicos, la institución de colonias de vacaciones, los planes de turismo escolar y para la ancianidad, y las estadías financiadas por la Fundación Eva Perón, o el Estado nacional y provincial bajo la consigna “Usted paga el pasaje, el gobierno el hospedaje”, fueron algunas de las medidas que hicieron de la política de turismo social una herramienta fundamental para democratizar el acceso a las vacaciones de cientos de miles de argentinos.