legislatura |
¿Por qué Mauricio no tiene lugar en UNEN?. Por Virginia González Gass
Legisladora de la Ciudad por el Partido Socialista Auténtico, en UNEN.
24.04.2014 04:02 |
Noticias DiaxDia |
La realidad argentina reclama espacios abiertos para la discusión y un debate de políticas públicas inclusivas consensuado entre todos. Ese camino sólo se logra con una activa participación ciudadana, acompañada de transparencia y responsabilidad institucional.
Si esto no ocurre, vuelven a repetirse formas unipersonales de gobierno que subordinan todo proyecto de país al criterio de un grupo de iluminados acostumbrados a repartir el juego como si se tratara de un casino.
No es un dato menor que existan planes operativos para establecer estados de excepción atenuados, en los que se restringe la protesta social y se avanza sobre derechos fundamentales logrados en estas tres décadas de democracia.
Este sábado 26 de abril se cumple un año de la represión en el hospital Borda. Allí el gobierno de Mauricio Macri demostró que prefiere la violencia sobre el diálogo.
En el último año de los casi 7 de gestión del PRO comenzó a desmoronarse esa suerte de Disneylandia vacía, que sólo puede llenarse con globos, papelitos y parodias al grupo Queen.
Pero esta vez el rey está desnudo. La capa y la corona del maravilloso Freddie Mercury ya no son un elemento válido para ridiculizar la política. Menos aún, para financiarla.
Todo este despilfarro no es gratis. Lo pagan:
-Los 9 mil chicos de 45 días a 3 años y otros 5 mil de 4 a 17 años, sin vacantes, hecho que evidenció el fallido sistema de inscripciones online para la escuela pública, a un costo de 15 millones de pesos.
-Los 162 mil vecinos que viven en villas o asentamientos, según datos del censo 2010, sobre un total de 500 mil personas en emergencia habitacional.
-Los trabajadores de la salud precarizados que están siendo despedidos gradualmente por el cierre de programas sanitarios, (Res.1657 del Ministerio de Salud).
-Los usuarios de subte que pagan tarifas injustificadas.
-Cada uno de los ciudadanos que paga un estimativo de $600 mil pesos por cada aula container en la que se apilan los pocos estudiantes que fueron reasignados
Estos son apenas unos pocos ejemplos de la ausencia de políticas sociales, falta de planificación y “soluciones” improvisadas, sobre las que no puede ignorarse una marcada reducción presupuestaria, principalmente, en las carteras de Salud, Educación, Promoción Social y Vivienda.
Mauricio Macri sintetiza todo lo malo de la década del noventa, asesorado por un publicista admirador de los procesos totalitarios que marcaron el siglo pasado.
Nada de nuevo tiene su modelo puramente administrativista. Reprime a los que menos tienen, agranda la deuda social y restaura el neoliberalismo de los años noventa.
El aumento desproporcionado de la deuda de la Ciudad en los años de gestión PRO ronda los u$s 2 mil millones de dólares. En comparación con 2007 -cuando la misma era de u$s 570 millones- esta cifra incrementó las obligaciones adquiridas en un 300 por ciento.
Este imaginario que se restringe sólo a pensar piropos poco felices no corresponde a una agenda seria de ningún mandatario, salvo que querramos para nuestro país un modelo europeo a semejanza de Silvio Berlusconi.
Por estas razones, entre otras, Mauricio no tiene lugar en otro espacio político más que el PRO(pio), cuya membresía siempre está asociada a proyectos elitistas y afanes personales.