| MINISTERIO DE SALUD
La OPS aprobó el Plan de Acción regional para evitar la obesidad infantil
04.10.2014 01:13 |
Noticias DiaxDia |
El control de los alimentos hipercalóricos y poco nutritivos y la promoción de la actividad física en las escuelas son algunas de las medidas que promueve el Plan de Acción para la Prevención de la Obesidad de la Niñez y Adolescencia, votado en la reunión de la Organización Panamericana de la Salud.
Los ministros de Salud y delegados de 41 países de América aprobaron ayer de manera unánime un conjunto de acciones concentradas en el Plan de Acción para la Prevención de la Obesidad en la Niñez y la Adolescencia, destinadas a reducir la problemática del sobrepeso, que en América Latina afecta entre el 20% y el 25% de las personas menores de 19 años y a un tercio de los niños y adolescentes de entre 6 y 19 años en los Estados Unidos. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad casi se duplicó entre 1980 y 2008 en todo el mundo.
El plan quinquenal se aprobó en el contexto del 53º Consejo Directivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que se reunió en Washington durante esta semana y que además abordó temas como el acceso y la cobertura universal de salud; la discapacidad y la rehabilitación; el acceso universal a sangre segura; las enfermedad infecciosas desatendidas y el cambio climático y la salud.
“Según estimaciones surgidas de observaciones y trabajos de campo realizados desde distintas áreas de la cartera a mi cargo, la obesidad entre los niños y adolescentes en Argentina crece en forma sostenida, al igual que en los adultos, tal como está sucediendo a nivel mundial, y esto enciende luces de alarma”, señaló el ministro de Salud, Juan Manzur.
“Este plan de acción quinquenal no sólo incluye recomendaciones para frenar el incremento de la obesidad en un segmento poblacional tan vulnerable, sino que también inaugura el necesario proceso de regulaciones que todos los países miembros debemos encarar en forma perentoria”, dijo el funcionario y remarcó que “Argentina tiene una experiencia exitosa en control del tabaco, reducción de sodio en los alimentos industrializados y en la eliminación de las grasas trans”.
El Plan de Acción describe en su objetivo general la necesidad de “detener el aumento acelerado de la epidemia de la obesidad en la niñez y la adolescencia, de manera de que no se registre aumento alguno en las tasas de prevalencia actuales en cada país. Esta meta requiere un enfoque multisectorial que abarque la totalidad del curso de vida y que se centre en transformar el ambiente obesogénico actual en oportunidades para promover un consumo mayor de alimentos nutritivos y un aumento de la actividad física”.
La estrategia está orientada a los más pequeños, porque cuanto más temprana es la edad en la que una persona adquiere sobrepeso, mayor es el riesgo de obesidad en edades más avanzadas, y por los efectos negativos que esta problemática tiene para la salud, como el caso de la diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares. Además es durante la infancia cuando se adquieren los hábitos alimenticios.
El plan quinquenal cuenta con cuatro líneas principales de acción: la atención primaria de la salud y la promoción de la lactancia materna; la promoción en las escuelas del aumento de actividad física; el consumo de alimentos saludables y la restricción de bebidas azucaradas y comidas con alto nivel calórico; la reglamentación de la publicidad y un alza de los impuestos a la “comida chatarra” y mayor acceso a los espacios recreativos.
“La obesidad presenta un importante problema para la salud pública, para la economía y para el desarrollo de nuestros pueblos. Entendemos a esta pandemia como el principal problema y un enorme desafío que enfrentan todos los países y que requerirá políticas públicas integrales más enérgicas, tanto a nivel nacional como regional y global”, sostuvo el viceministro, Eduardo Bustos Villar, representante del país en la reunión de la OPS.
En la Argentina, 1 de cada 3 estudiantes presenta sobrepeso, y el 5,9% padece de obesidad, según datos de la ENCUESTA Mundial de Salud Escolar, realizada en 2013. El mismo sondeo destaca que solo el 17,6% de los alumnos consumen 5 porciones de frutas y verduras por día, y el 50% toma diariamente bebidas azucaradas. En cuanto a la actividad física, en 1 de cada 4 escuelas se dictan 3 o más clases semanales.
“Es una muy buena noticia la aprobación de este plan de acción, que pone el ojo en la epidemia global de obesidad, el principal problema que estamos enfrentando, no solo en nuestro país, si no a nivel global”, señaló Sebastián Laspiur, director de Promoción de la Salud y Control de Enfermedades No Transmisibles de la cartera sanitaria nacional.
El funcionario afirmó que “tenemos por delante un gran desafío para poder detener el avance de la obesidad y el sobrepeso, en un esfuerzo que debe ser de la sociedad toda, no solo desde el sector salud, para poder avanzar en regulación de alimentos, entornos propicios para la actividad física y promoción de la alimentación saludable".
"Vemos con preocupación el incremento del consumo de alimentos con bajo contenido nutricional y gran aporte calórico, como las bebidas azucaradas, que en la actualidad se consumen a diario y en grandes cantidades”, comentó Laspiur y subrayó que "es muy importante comenzar en la niñez a promover estrategias educativas para incluir frutas y verduras en la alimentación diaria, y también avanzar en políticas regulatorias en los kioscos y comedores escolares que permitan a los chicos adoptar hábitos saludables a temprana edad y evitar la obesidad en el futuro”.