| MINISTERIO DE INDUSTRIA
Ensaya INTI muebles infantiles más seguros
El INTI firmó un acuerdo con la Sociedad Argentina de Pediatría para trabajar en la prevención de lesiones asociadas al uso de muebles infantiles. Brindarán asesoramiento al sector maderero en la fabricación del mobiliario infantil y trabajarán en una normativa que reglamente su producción.
30.03.2015 07:23 |
Noticias DiaxDia |
Al analizar las causas de las lesiones que sufren los niños en todo el mundo, la Organización Mundial de la Salud destaca el carácter prevenible de la mayor parte de ellas, advirtiendo en consecuencia sobre la necesidad de desarrollar estrategias que permitan minimizar los riesgos de accidentes.
En los primeros años de vida, un porcentaje elevado de lesiones suelen producirse en el hogar, y parte de esas lesiones se vincula con el uso de mobiliario infantil.
Rubén Sabala, miembro del Comité de Prevención de Lesiones de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) expresa que “en niños menores de un año de edad, uno de los motivos que causa más muertes infantiles son los mobiliarios". Sabala afirma que las principales causas de lesiones son las caídas y traumatismos, en los que cunas y los andadores suelen tener un papel protagónico.
La SAP desaconseja el uso de andadores, y en lo que hace a las cunas, advierte sobre la necesidad de mejorar su diseño, uno de los principales factores a abordar en el camino de reducir las lesiones infantiles.
Con esa intención, la SAP firmó un convenio con el INTI que busca principalmente promover la fabricación de muebles infantiles más seguros. Ello requiere el desarrollo de una normativa en la que ambas instituciones trabajarán de manera conjunta.
De esta manera, en un futuro la SAP podría indicar a los compradores de mobiliario infantil que observen si el producto que están a punto de adquirir fue fabricado teniendo en cuenta las normas de seguridad recomendadas, o simplemente constatando si cuenta con la certificación del INTI, la que será fácilmente visible a través de una etiqueta identificatoria que brinde seguridad a los padres.
Marcelo Orlievsky, integrante del Laboratorio de Muebles del Centro INTI-Maderas y Muebles comenta que en la actualidad “los ensayos que las empresas fabricantes de muebles infantiles solicitan al INTI son de carácter voluntario, dado que en la Argentina y en el resto del mundo, no existe una obligatoriedad de certificar ningún tipo de mueble, probablemente porque es un producto de construcción casi artesanal".
El especialista señala que algunos cambios en los diseños son simples de aplicar, y simplemente no se realizan por desconocimieto; otros problemas que detectaron se relacionan con la elección de materiales, como por ejemplo el empleo de pintura no adecuada por su toxicidad.
"Es fundamental que los muebles infantiles sean seguros, y es responsabilidad de los padres elegir aquellos que lo sean. El problema es que a veces piensan que están comprando lo mejor y no es así!, afirma.
El Laboratorio de Muebles de INTI-Maderas y Muebles realiza ensayos de durabilidad de materiales para anticiparse a saber, antes de la fabricación, cómo reaccionará una cuna con la presión que ejercerá el bebé a medida que crece y así evitar posibles accidentes.
Para que este Convenio sea efectivo, además del compromiso asumido por la SAP y el INTI es necesario contar con la concientización del usuario para que a la hora de comprar un mueble infantil como lo es una cuna, exija un manual de instrucciones y que se cumpla con los procedimientos técnicos de seguridad en su fabricación.
Algunas recomendaciones a tener en cuenta a la hora de comprar una cuna
Los barrotes de las barandas no tienen que estar separados por más de 6,5 cm ni por menos de 4,5 cm para evitar que pase la cabeza del bebe o que quede atrapado alguno de sus miembros.
La baranda tiene que ser mayor de 60 cm desde la base de la cuna, sin tener en cuenta el espesor del colchón para evitar caídas, una de las principales causas de accidentes.
Se recomienda evitar diseños decorativos que sean calados o bajo relieve.
Las barandas móviles son desaconsejables, porque sus mecanismos suelen ser peligrosos.
Las cunas deberían traer escritas sus instrucciones en castellano en un manual o en la propia cuna.