| MINISTERIO DE SALUD
Garantiza el Estado tratar hepatitis C con sofosbuvir
Tras la aprobación de dos registros de la droga por parte de la ANMAT, el Ministerio de Salud, sociedades científicas y ONGs acordaron los criterios de inclusión de pacientes de todo el país que requieran un tratamiento inmediato de la hepatitis C crónica con esquemas libres de interferón.
09.11.2015 06:22 |
Noticias DiaxDia |
Una vez aprobados por parte de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (ANMAT) dos registros de sofosbuvir 400 miligramos contra la hepatitis C, el Ministerio de Salud, a través del Programa Nacional de Control de las Hepatitis Virales (PNCHV), definió junto a sociedades científicas y ONG’s los criterios de inclusión de pacientes de todo el país para que reciban esquemas para hepatitis C crónica libres de interferón.
La cartera sanitaria nacional alcanzó el acuerdo con la Asociación Argentina para el Estudio de las Enfermedades del Hígado (AAEEH), la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) y la Fundación Huésped. También se establecieron los puntos referentes al seguimiento del paciente durante y después del tratamiento.
Luego de la aprobación de dos registros de sofosbuvir por parte de la ANMAT el pasado 30 de octubre, éste podrá comenzar a administrarse en combinación con las drogas daclatasvir y simeprevir para, en conjunto, constituirse como un tratamiento genuino. El sofosbuvir es una de las drogas de última generación aprobadas y recomendadas como primera línea de tratamiento para la hepatitis C crónica.
De esta manera, se podrán empezar a efectuar los tratamientos libres de interferón cuyo inicio estaba demorado a la espera del registro del sofosbuvir en el país. Por ese motivo, en una primera instancia se priorizará la administración de ese fármaco a pacientes que presentan estadios avanzados de enfermedad por hepatitis C crónica y que requieren tratamiento inmediato en todo el territorio nacional, principalmente aquellos con cirrosis hepática y con manifestaciones extra hepáticas asociadas a hepatitis C crónica clínicamente significativas.
Para un tercio de quienes presentan la condición de cirrosis hepática, el hecho de no recibir tratamiento en un corto período podría constituir un riesgo de vida.
Con este criterio de inclusión y seguimiento de los pacientes consensuado entre el Ministerio de Salud y las diferentes sociedades científicas para una primera etapa de tratamiento, será el Estado nacional el que garantizará la ejecución del mismo, independientemente de la cobertura que posean los pacientes.
En la actualidad, la hepatitis crónica por virus C representa la primera causa de trasplante hepático y es una importante causa de muerte en pacientes con VIH.
Vacunas contra hepatitis A y B en el Calendario Nacional
Además del acceso a los medicamentos, el Ministerio de Salud viene llevando adelante una activa política en relación a la prevención y el testeo de hepatitis.
Las vacunas contra las hepatitis A y B se encuentran incluidas en el Calendario Nacional de Vacunación y están disponibles en hospitales públicos y centros de salud del país.
En 2003-2004 Argentina era un país de endemicidad intermedia alta y la hepatitis A era la primera causa de falla hepática fulminante y trasplante de hígado en niños. Desde la incorporación de la vacuna en forma gratuita para todos los bebés a los 12 meses en 2005, como una política de Estado, se observó una reducción del 88% de los casos de esta enfermedad en todas las edades y en todas las regiones, transformando a nuestro país en uno de baja endemicidad, y no se reportan trasplantes de hígado a causa del virus de la hepatitis desde marzo de 2007.
Respecto a la hepatitis B, en 2000 se comenzó a vacunar a los menores de un año, en 2003 a los adolescentes y a partir de julio de 2012, el Estado Nacional universalizó la vacuna a fin de que todos los ciudadanos puedan iniciar o completar el esquema de inmunización contra esta enfermedad a cualquier edad.
A su vez, es objetivo del Programa Nacional de Control de las Hepatitis Virales estimular y promover el testeo de las hepatitis B y C en la población general y en grupos específicos de riesgo. El equipamiento necesario, así como las determinaciones de reactivos de hepatitis, son distribuidos a través de las diferentes jurisdicciones a 62 laboratorios de todo el país.
En este sentido, la cartera sanitaria dispone de las herramientas de serología y biología molecular para el diagnóstico y seguimiento de las hepatitis virales. Tres laboratorios de referencia (Hospital Muñiz, Laboratorio Central de la provincia de Córdoba e Instituto ANLIS-Malbrán) concentran el procesamiento de las determinaciones, y el acceso a las mismas está contemplado para toda la población con cobertura pública.