| MINISTERIO DEL INTERIOR
Frigerio recorrió la ampliación de una planta de líquidos cloacales en lanús
El ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda, Rogelio Frigerio, acompañado por el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, recorrió ayer las obras de ampliación de una planta de tratamiento de líquidos cloacales que beneficiará a 100 mil vecinos del distrito y que, además, forma parte del plan de saneamiento de la cuenca Matanza-Riachuelo.
29.04.2016 07:26 |
Noticias DiaxDia |
“Esta obra es fundamental para Lanús, que es uno de los distritos de la provincia de Buenos Aires más atrasado en términos de obras de saneamiento y cloacas. La idea es que al final de este mandato el cien por ciento de los ciudadanos del distrito tenga acceso a estos servicios y eso es fundamental para la calidad de vida y para la salud”, remarcó Frigerio durante la recorrida.
El ministro destacó que con la ampliación de la planta de Agua y Saneamientos Argentinos S.A. (AySA) se beneficiarán a 100.000 habitantes y también permitirá el saneamiento paulatino del Riachuelo, que es otro de los grandes objetivos del gobierno del presidente Mauricio Macri.
“Estamos trabajando para que la planta esté en funcionamiento en septiembre y para que en menos de cuatro años el 100% de los habitantes de Lanús tengan acceso a la red de cloacas”, resaltó.
Por su parte, Grindetti señaló que “las obras estaban muy lentas”, pero que a partir de ahora se aplicará “una lógica distinta y los trabajos se van a terminar en los plazos previstos”.
“Lanús no ha sido tenido en cuenta en los últimos años. Realmente ahora sí nos están escuchando y seguramente los vecinos van a poder tener, como decía el Ministro, el cien por ciento del distrito servido por la conexión en cuatro años”, subrayó.
En la recorrida por la planta de AySA también estuvo presente el secretario de Obras Públicas, Daniel Chaín.
La “Planta de Tratamiento de Efluentes Lanús”, está ubicada entre las calles General Olazábal, Boquerón, Hernando de Magallanes y Coronel Molinedo, en Valentín Alsina. Los efluentes de la cuenca Lanús volcarán al complejo a través de un colector de 800 milímetros de diámetro, y las áreas más lejanas llegarán a dicha planta a través de un sistema de bombeo por impulsión.