Esteban Bullrich sobre el fallecimiento del prof. Francisco Delich

Delich será recordado siempre como el primer Rector de la Universidad de Buenos Aires desde el restablecimiento de la democracia, cuando en 1983 el Presidente Alfonsín lo distinguió para tan alto cargo y responsabilidad. Durante más de 500 días –que él mismo recordó en un libro el año pasado- restableció la calidad y autonomía académica de esa casa, después de muchos años en los que la UBA había sido sólo un apéndice del gobierno nacional.

Los servicios públicos de Francisco Delich se extienden, además, a otras responsabilidades no siempre recordadas: Convencional Constituyente en la Reforma de la Constitución en 1994, Rector de la Universidad Nacional de Córdoba, Director de la Biblioteca Nacional y Diputado Nacional en el período 2005/2009.

Sociólogo por las Universidad de Córdoba y La Sorbone, su carrera se extiende a una vasta obra como autor de numerosos libros dedicados a la problemática social y cultural, tanto de la Argentina como de toda América Latina.

Más allá de tantos títulos y honores, le gustaba en los últimos tiempos ser reconocido, con orgullo, por aquel que estaba más cerca de sus afectos: Profesor Emérito de la Universidad Nacional de Córdoba.

En el actual proceso por establecer una Universidad autónoma e independiente, en términos no solo académicos sino también presupuestarios, el nombre de Francisco Delich es y será siempre una guía permanente de nuestra gestión.