EN LOOR DE LOS MUERTOS
Somos los muertos, aquí no hay gloria ni trompetas,
sólo frágiles tumbas y viento huracanado
sobre esta tierra hostil que adormece a nuestros huesos,
nuestras bocas y manos y las frentes desnudas
para abrir en los cielos de la gloria una brecha.
No es de luz esta tierra, y el aire ilimitable
sólo es abismo tórrido y trampa de la muerte,
tierra gris y porosa sin númenes solares,
sin flores –salvo el sueño de nuestros corazones–
ni bosques columnares ni el signo cierto
de la vida inmortal dormida en nuestros pechos.
No lloréis por la vuelta de nosotros: adversa
nos fue la tornadiza marejada del sino,
pero algo más profundo que este mar y estas noches
hemos dejado atrás para que nos recuerden,
algo que aquí compramos con el vino precioso
de nuestra sangre, hecha de pronto llamarada,
bajo el pérfido cielo de estas piedras inútiles
para que se tornaran en delicada patria.
Buenos Aires, 15 de agosto de 1982
POESÍA ARGENTINA Y MALVINAS. UNA ANTOLOGÍA (1833-2022). Investigación, selección, prefacio y posfacio de Enrique Foffani y Victoria Torres (Coordinadores)