González Gass:"Acompaño a los trabajadores en esta medida de fuerza"

Todo comenzó en diciembre del año pasado, cuando los dueños del inmueble advirtieron a los trabajadores que el lugar iba a cerrar. A raíz de esto y tras varios meses sin cobrar los suelos, los empleados conformaron una cooperativa de hecho para compensar lo que se les debía y de esta manera no perder su fuente de trabajo. 

Desde ese momento hasta ahora, los trabajadores han resistido varios intentos de desalojo. Estas órdenes fueron requeridas por los dueños del lugar, quienes afirman que el inmueble ya se ha vendido. Si esto se hace efectivo alrededor de 150 personas quedaran en la calle sin trabajo. 

Los propietarios del Alé Alé poseen cuatro restaurantes más los cuales también se transformaron en cooperativas luego de querer ser cerrados en las mismas condiciones.