La presidenta Cristina Fernández de Kirchner votó a las 11:15 en Río Gallegos y al salir declaró a la prensa el "salto cualitativo que representa para la democracia que por segunda vez se hayan realizado las primarias abiertas y todos los partidos puedan tener acceso gratuito a la opinión pública".
La Mandataria llegó acompañada por su nuera Rocío y su nieto, Néstor Iván, a la escuela Nuestra Señora de Fátima de Río Gallegos, donde viene emitiendo su sufragio en los comicios y luego de depositar el sobre en la urna accedió a una improvisada rueda de prensa, en la que inclusive tomó micrófonos y bromeó acerca del circunstancial rol de "movilera" que asumió para facilitar el diálogo con los periodistas y camarógrafos que se arremolinaron.
Ante una consulta sobre el desarrollo de los comicios, dijo que había hablado con el ministro del Interior, Florencio Randazzo, quien le informó que se llevaban a cabo con normalidad, con nuevo padrón, "pese a agoreros que pronosticaban que iba a haber demora, nada de eso sucedió.
También se comunicó con el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, según añadió.
Señaló que iba a ir a la casa de Máximo en la capital santacruceña y que después vamos irían a Buenos Aires con su hijo para seguir las alternativas de las elecciones.
Confesó tener "sensaciones muy lindas. por ser estas las segundas Paso, y acerca de las denuncias manifestó venir escuchándolas desde 1987 pero en definitiva siempre sucede como con esas que se hacían en Santa Cruz, que después quedan en nada.
Reflexionó que se gana, "no con denuncias, sino con propuestas, con gestión y gobierno y siempre es lo que hicimos".
Agregó que "cumplimos 30 años consecutivos de democracia, la mitad de mi vida, los otros 30 años, salvo del 73 al 76, el resto sin democracia. O sea que para los que tienen de 30 años para abajo, les digo que deben estar muy tranquilos, seguros, porque no hay nada mejor que la democracia".