La diputada socialista Virginia González Gass (PSA) manifestó su apoyo al reclamo de las supervisoras de la Escuela de Educación Especial N° 7, quienes rechazaron la decisión del Ministerio de Educación porteño de instalar un "aula experimental" en su nueva sede -que aún no ha sido inaugurada-, coordinada por una institución privada "San Martín de Porres" de Isidro Casanova.
"Que una escuela pública trabaje con un instituto privado no tiene sentido, así como tampoco tiene lógica trabajar desde la perspectiva conductista", expresó González Gass.
A su vez agrega en un comunicado que la Escuela de Educación Especial N° 7, conducida por Nora Dubini, Angélica Graciano y Teresita Sibemhalt, funciona desde el año 2011 en un lugar alquilado que no cumple con todas las condiciones necesarias para el desarrollo de los alumnos. Su espacio de emplazamiento en el barrio porteño de Villa Soldati fue demolido para construir otro nuevo, cuya inauguración se prevé para el 19 de septiembre de este año, pero que se viene prometiendo desde diciembre de 2012.
"Hay que trabajar e intentar darle una solución a los problemas de estos chicos y no modificar su conducta con lógicas privadas", agregó González Gass.