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A modo de homenaje.
“Es la vida, más que la muerte, la que no tiene límites.”
Gabriel García Márquez
23.04.2014 11:58 |
Bruch Gabriela |
Fue hace pocos días. No importa el tiempo. Si fue hace tanto que se escuchó su primer grito en Aracataca. Podría ser la mala hora , pero no. El otoño de patriarca, se había convertido en invierno para volver a reverdecer, como aquel ángel que apareció herido, un día, en un patio de Macondo ( donde Isabel siempre ve llover) y salió volando, con alas nuevas para el asombro de aquel perro azul, con esos ojos. Esos ojos . Ojos de perro azul.
En este hemisferio , caía la hojarasca , y si bien, fue una muerte anunciada, sentimos todos la tristeza oceánica de la partida de aquel y de su bendita manía de contar.
Pero pronto dimos cuenta de la eternidad, así como eterno es el amor y esos otros demonios, que nos sobrevuelan, día y noche, diciéndonos cosas ininteligibles al oído.
Y nos volvemos a ver, adolescentes; luego adultos, poblando con un Buendía, nuestros largos, pero bien largos, cien años .
De soledad.
Hasta siempre maestro.
Gabriel García Márquez ( Aracataca, Colombia 1927 / D F, México, 2014)