El diputado nacional Julio Martínez (UCR – La Rioja) afirmó que es una afrenta para la República que asuman los legisladores nacionales y provinciales del Frente para la Victoria que compraron sus bancas, según ha reconocido el propio gobernador.
“Beder Herrera reconoció que entregó dádivas a cambio de votos en la última campaña, es decir compró voluntades, algo que está penado por la ley, entonces la elección de estos legisladores está viciada de nulidad, es producto del fraude y de la ilegalidad”, remarcó Martínez.
“Hemos denunciado ante la justicia penal al gobernador ya que su reconocimiento puede configurar un delito electoral y también la malversación de caudales públicos, y queda demostrado que sus diputados no son el fruto de la voluntad popular, sino del uso proselitista de la pobreza y la miseria, criticó el legislador”, agregó.
Martínez, junto con el resto de los dirigentes de la Fuerza Cívica Riojana, hizo un pedido de Juicio Político al gobernador, por su incumplimiento de los deberes de funcionario público y la posible comisión de delitos comunes.