El vicepresidente 1° de la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires, Cristian Ritondo, presidió el acto en el que se presentó a la Legislatura como "Edificio Cardioprotegido", luego de que 184 empleados de la Casa hayan participado en los cuatro cursos de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) dictados durante el mes de febrero por la Cruz Roja Argentina.
Ritondo explicó que "los espacios cardioprotegidos son lugares donde se encuentran puntos de emergencia cardíaca, también llamados columnas de rescate cardíaco, estructuras que contienen un desfibrilador externo cuya tecnología permite que cualquier persona pueda utilizarlo, ya que el propio aparato realiza un diagnóstico al paciente y sólo administra las descargas eléctricas cuando es necesario".
Y agregó "al haber instalado los desfibriladores en todo el Palacio, era necesario que el personal estuviera capacitado para salvar vidas y por eso hemos firmado un convenio con la Cruz Roja Argentina con cursos que se enmarcan en los Programas de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y Medialuna Roja, dictados por personal profesional médico y técnico de la organización internacional".
"La gran convocatoria de diversas áreas, en especial de Seguridad y Servicios Operativos, y despachos de diputados muestra el sentido de responsabilidad y compañerismo del personal de la Legislatura, al colaborar e instruirse durante las cuatro horas de duración del curso para poder asistir a cualquier persona en caso de emergencia", sostuvo el vicepresidente 1° de la Legislatura.
El acto se llevó a cabo en el Salón Eva Perón y contó con la presencia de la directora general de la Cruz Roja, Cecilia Villafañe, la directora de Servicio Externos de la Cruz Roja, Melisa Pasquali, la directora general de Fortalecimiento Institucional y Modernización Legislativa, Natalia Carfi; el director general de Recursos Humanos, Martín Diago; el director general de Servicio Operativos, Roberto Vila y el subsecretario de Enlace Administrativo, Matías Ranzini, quienes presentaron los equipos a utilizar.
Por su parte, Villafañe afirmó "Aprender RCP es un acto de amor porque es hacer algo por el otro. Saber primero auxilios es necesario a la hora de poder salvar una vida. Por eso me enorgullece esta iniciativa que permite que un edificio público, declarado Monumento Histórico Nacional sea precursor como institución cardioprotegida".
"Esta la iniciativa nos llena de orgullo porque habla del inmenso compromiso del personal para la concreción del proyecto", concluyó Ritondo al recibir el certificado que declara a la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires como Edificio Cardioprotegido.