Los datos surgen de un informe difundido por la Cámara de Flota Amarilla de Chubut (CAFACH) en referencia al escaso consumo que existe en el país de especies acuícolas y derivados. Hay casi 3 millones de jóvenes que jamás lo probaron y que Argentina ostenta la menor ingesta de pescado de todo el mundo
A pesar de tener un litoral marítimo de 4.700 kilómetros de extensión, con más de 90 especies distintas, el consumo interno de pescados y mariscos es extremadamente bajo, alcanzando apenas la cuarta parte del promedio internacional. A ésto se le suma que el 32.6 % de los jóvenes manifiestan que nunca tuvieron presente a dichas especies en sus dietas diarias.
El organismo a cargo del trabajo detalló que el sondeo se realizó entre el 1 de agosto y el 25 de septiembre a partir de encuestas telefónicas basadas en un cuestionario estructurado (IVR) sobre unos 1947 consumidores testigos de entre 13 y 24 años de edad.
También se relevaron unos 157 comercios de venta de productos alimenticios (almacenes, autoservicios de proximidad, supermercados, hipermercados y pescaderías) de todas las
capitales provinciales.
A nivel general, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), un argentino tipo come apenas un poco menos de 5 kilos al año, casi la mitad que el consumo promedio de América Latina (10 kilos) y mucho menos que la media mundial (20 kilos).
Sin embargo, el informe de la CAFACH fué mucho más allá. Gustavo González, Presidente de la entidad señaló que “el estudio demostró que casi un tercio de los jóvenes del país nunca probaron siquiera un pequeño trozo de ninguna especie de pescado, marisco o sus derivados”.
Según el Censo Nacional de 2022, segmentando la estructura de la población por grupos de edad, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo del país (INDEC), informó oficialmente que el grupo etario mencionado constituye el 18.5 % de la población total del país (46.044.703 habitantes), vislumbrando que existe un total de más de 8.5 millones de adolescentes y jóvenes de esa edad, de los cuales unos 2.7 millones nunca probó los frutos del mar.
Al respecto, el informe destacó que sobre la totalidad de los casos testigos que reconocieron no haber ingerido nunca estos productos, el 62.3 % afirmó que “en su casa nunca le ofrecieron estas variedades”, mientras que el 26.5 % reconoce al pescado como un alimento “muy caro”,y que, finalmente, el 11,2 % afirmó que se debe “a un problema de baja inserción en el mercado de alimentos”.
Sobre este último ítem, el relevamiento clasificó al pescado y sus derivados como “productos de consumo ocasional en el mercado interno”. Para Gónzalez, esos datos son fácilmente comprobables “con tan sólo contar la cantidad de pescaderías que existen en proporción a las carnicerías y verdulerías que hay a lo largo y a lo ancho del país.
“Sólo en la Ciudad de Buenos Aires, existen alrededor de 15 mil carnicerías y unas 10 mil verdulerías, contra apenas un centenar de pescaderías”, señaló el titular de la CAFACH, y agregó que “la misma proporción se observa en la oferta exhibida en autoservicios, súper e hipermercados de todo el país”.
Los datos toman mucha fuerza si se tiene en cuenta que de acuerdo a un informe de la Universidad Católica Argentina (UCA) hay 6 de cada 10 niños debajo la línea de pobreza, y una proporción alta en situación de inseguridad alimentaria, con 4,2 millones de chicos que comen menos que antes, por efecto de la crisis económica que azota al país.
Por último, Gustavo González consideró que “los números no hacen más que visibilizar la poca importancia que Argentina le ha dado al mar durante toda su historia” y concluyó exhortando a todos los espacios políticos y a las autoridades nacionales y provinciales a que incluyan al consumo interno de pescado como una prioridad de cara a los próximos cuatro años, para garantizar la seguridad alimentaria en todo el país”.