El ser sensible. Por Raúl Peloni

Quien desea un porvenir incierto y lleno de desventuras? Quien argumenta que debemos soportar dificultades y una fuerte crisis social para salir más fuertes? Solo aquellos o aquellas que cuentan con una sólida posición, quienes pecan de masoquismo o a quienes han convencido que su bienestar es perjudicial para el país. Todos estos argumentos están impregnados no solo por un grado de egoísmo, mentira y fatalismo, sino que van a contramano del humano objetivo de construir una sociedad sensible, inclusiva solidaria y justa.
La Argentina es un país no sólo en vías de desarrollo, tiene un potencial que le permitiría en un lapso razonable convertirse en un país desarrollado y estable, siempre y cuando su capital humano y su calidad de vida crezca y no se deteriore. De lo contrario lo único que estaríamos haciendo es, no solo crear una inmensa poblacion de ciudadanos más vulnerables y mas empobrecidos, sino corriendo el grave riesgo de debilitar los cimientos que conforman a una verdadera Nacion.
De eso se trata.