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HOMERO EXPÓSITO: EL LENGUAJE DEL TANGO. Por David Antonio Sorbille
21.11.2025 13:49 |
Noticias DiaxDia |
I
Horacio Salas, en su ensayo "El tango", publicado por primera vez en 1986, analiza el desarrollo de este fenómeno musical en el marco de la historia social del país.
El tango también es una música que en sus comienzos fue una combinación de ritmos nativos y foráneos, y se ha mantenido mundialmente como uno de los géneros musicales más populares. Si bien nació como música instrumental exclusivamente para ser bailado, con el tiempo incorporó el canto, casi siempre solista, eventualmente a dúo, sin coro, pero manteniendo de manera bastante marcada la separación entre tangos instrumentales y tangos cantados.
Asimismo, como baile popular propone una profunda relación emocional en cada pareja de bailarines. Refiriéndose a esa relación, Enrique Santos Discépolo, definió al tango como «un pensamiento triste que se baila».
En 1898 se imprime el primer tango con autor registrado, «El entrerriano», del afroporteño Rosendo Mendizábal. Un año antes, en 1897, se había designado por primera vez al nuevo género como «tango», en la zarzuela “Justicia Criolla” de Ezequiel Soria. En 1899 el violinista Ernesto Ponzio compone «Don Juan» y en 1903 Ángel Villoldo compone «El choclo».
Es lógico decir que la canción de tango fue alumbrada por el teatro y se suele comparar el tango con una pieza de teatro dramática: el cantor de tango está relatando precisamente un drama.
La poesía tanguera registra el uso de metáforas y reflexiones filosóficas y al mismo tiempo muy popular como lo podemos verificar en las siguientes frases: “el misterio de adiós que siembra el tren” que utiliza Homero Manzi en “Barrio de tango” (1942); “tu mezcla milagrosa de sabihondos y suicidas” de Enrique Santos Discépolo en Cafetín de Buenos Aires (1948); “con un pedazo de vida, naranjo en flor” que nos ilustra Homero Expósito en su magnífico tango “Naranjo en flor” (1944).
Como fenómeno rioplatense dirá Horacio Ferrer que “Buenos Aires es la protagonista del tango y Montevideo, espectador del tango. La locura porteña es la maravilla y el secreto el tango.”
Al respecto, la conjunción de la poesía y el ritmo original del tango, encuentra el cénit en la permanente renovación a la que acuden los compositores más reconocidos.
Entre las grandes orquestas podemos mencionar las de Julio De Caro, Francisco Canaro, Rodolfo Biagi, Anibal Troilo, Osvaldo Pugliese, Juan D’Arienzo, Carlos Di Sarli, Osvaldo Fresedo, Alfredo de Ángelis, Miguel Caló, Ángel D’Agostino, Horacio Salgán, Osmar Maderna, José Basso, Domingo Federico, Armando Pontier, Mariano Mores, Astor Piazzola, etc. Cantantes como Carlos Gardel, Ignacio Corsini, Mercedes Simone, Roberto Goyeneche, Azucena Maizani, Francisco Fiorentino, Edmundo Rivero, Floreal Ruiz, Ángel Vargas, Alberto Marino, Tita Merello, Hugo Del Carril, Ada Falcón, Héctor Mauré, Nelly Omar, Carlos Dante, Alberto Morán, Charlo, Jorge Vidal, Alberto Castillo, Virginia Luque, Jorge Maciel, Rubén Juárez, Susana Rinaldi, etc. Asimismo, letristas como Enrique Cadícamo, Héctor Pedro Bloomberg, Celedonio Flores, Cátulo Castillo, Homero Manzi, José María Contursi, Julián Centeya, Juan Carlos Cobián, Carlos Pesce, Enrique Delfino, Héctor Negro, entre otros.
“Y ese proceso de superación poética del tango -sostiene Luis Adolfo Sierra- a nuestro juicio culmina con Homero Expósito quien deviene poéticamente del romanticismo nostálgico y evocativo de Homero Manzi, y el grotesco dramatismo sarcástico de Enrique Santos Discépolo”.
II
El 5 de noviembre de 1918 nació Homero Aldo Expósito en Campana, provincia de Buenos Aires. Tuvo dos hermanos: Virgilio y Juan (Tito Alberti), también dedicados a la música.
Cursó estudios como alumno pupilo en el Colegio San José de Buenos Aires, luego cadete del Liceo Militar y estudiante de Filosofía y Letras, que contribuyó a desarrollar una prodigiosa cultura filosófica y literaria que fue acrecentando en el conocimiento de las modernas corrientes poéticas. Se dedicó, también, a la actividad teatral como director y actor desde temprana edad.
Autodefinido humanista, profundizo la lectura de Éluard, Breton, Lautréamont, Rimbaud, García Lorca y Ortega y Gasset. Y en Buenos Aires a partir de 1945, comenzó un itinerario creador que lo vincularía al mundo del tango junto a su hermano y músico, Virgilio Hugo Expósito, con quien compuso títulos fundamentales como "Naranjo en flor", "Absurdo", "Maquillaje", "Chau, no va más", “Farol” y “Oro falso”.
Homero Expósito integró SADAIC en los años 50’ como tesorero, junto a Cátulo Castillo, Julio De Caro, José Maria Contursi, Juan José Guichandut, Pepe Razzano, Manolo Parada, Ciriaco Ortiz, Vicente Demarco, Aníbal Troilo, Homero Expósito, Virgilio San Clemente y Armando Baliotti.
Luego renuncia y viaja a Europa; y a su regreso ya se lo considera como un poeta fundamental por su inspiración y originalidad.
“Confesaba que le preocupó siempre el cuidado del lenguaje, logrando libertad absoluta en el empleo de las licencias idiomáticas del léxico corriente necesario. Decía que el impresionismo había invadido todas las formas de expresión, y no había motivo para que la letra del tango fuese una excepción”.
En 1985 recibe un Diploma al Mérito de los Premios Konex.
Algunos de sus títulos consagrados son: “Afiches”, con Música de Atilio Stampone; “Al compás del corazón”, “Percal”, “Yuyo verde” y “Tristezas de la calle Corrientes”, con Domingo Federico; “Cafetín”, con Argentino Galván; “Ese muchacho Troilo”, con Enrique Francini; “Fangal”, compartiendo letra con Enrique Santos Discépolo y música de Virgilio Expósito; “Qué me van a hablar de amor!”, “Flor de lino” (vals), “Pedacito de cielo” (vals) y “Quedémonos aquí”, con Héctor Stamponi; “Pequeña” (vals) con Osmar Maderna; “Trenzas” y “Margot” con Armando Pontier; y “Te llaman Malevo” con Anibal Troilo.
Homero Expósito fallece el 23 de septiembre de 1987, y su legado se puede sintetizar en una frase que marca su elevado humanismo: “El arte debe tender a una noción de universalidad que sirva para mejorar el presente, dar cabida a un mejor futuro y explicar el pasado”.
Bibliografía
SALAS, Horacio; El Tango Planeta, 1986.
EXPÓSITO, Homero; Vida de perro (Poesía) Editorial: Corregidor, 2006.
SIERRA, Luis Adolfo; Homero Expósito. Revista "Tango y Lunfardo", Nº 74, Chivilcoy 12-05-1992.