“Estoy satisfecho porque después de enérgicas demandas, comienzan a aplicarse algunas medidas sobre la telefonía celular que venimos reclamando insistentemente. Fueron suspendidas las nuevas tarifas de teléfonos celulares que iban a regir desde el 1° de este mes. Es importante también, que el gobierno haya tenido que reconocer la mala calidad de los servicios prestados.
Agregó: “Pero esto no es suficiente. Faltan acciones concretas para resolver el colapso de la telefonía móvil en el interior del país. Hay que dar marcha atrás con los aumentos injustificados de tarifas”.
Maldonado destacó que “es preciso declarar como servicio público a la telefonía celular y resolver ya esta situación de emergencia. Eso es lo que estoy promoviendo en un proyecto de ley que contempla todos los reclamos de los usuarios. Voy a continuar con las reuniones, consultas y recibo de reclamos de los abonados, como lo vengo haciendo en la vía pública y en organizaciones populares”.
“El gobierno tiene que comprender que resulta indispensable la licitación de frecuencias sin utilizar, que se instalen más antenas en todo el país, esencialmente en el interior, donde es muy mala la infraestructura del sistema de internet y telefonía móvil”, dijo.
“Si esto no se hace, seguiremos sufriendo un servicio deficiente por la falta de intervención del Estado frente a los intereses casi monopólicos de las compañías internacionales que explotan este gran negocio. La movilización de los usuarios, la difusión de esta problemática y la acción parlamentaria, harán que el gobierno deba intervenir para ir solucionando estos problemas”, concluyó Maldonado.