Dicha medición arrojó una variación del PBI para el segundo trimestre de 2013 de 5,4% y una variación acumulada de 3%, datos que confrontan claramente con los informados por INDEC, 7,4% y 5,1% respectivamente.
Al respecto, Brown señaló que "nuestro país no es creíble, no tiene estadísticas confiables, algo que puede beneficiar a algunos y perjudicar a otros, pero que en todos los casos deriva en que nadie está seguro de lo que sucede o de lo que se informa porque todo está basado en la mentira. En el caso del costo de vida, por ejemplo, lo que ocurre es que el Gobierno obtiene recursos adicionales al no reconocer los datos reales. Y en el caso del cálculo del PBI, se corre el riesgo de pagar más de 3.800 millones de dólares que no corresponden a los bonos que se ajustan a su crecimiento".