El presidente del Bloque de Diputados Nacionales de la UCR, Ricardo Gil Lavedra, llevará a cabo varias iniciativas tendientes a aclarar e investigar los presuntos hechos de corrupción por parte de la empresa Embraer en sus operaciones en la Argentina.
Se trata de sospechas de corrupción de un monto extraordinario, vinculado a la adquisición de 20 aeronaves E-190 para Austral Líneas Aéreas por casi 700 millones de dólares, coordinada por el ex secretario de Transporte Ricardo Jaime. Como sabemos, Austral Líneas Aéreas es una empresa controlada de Aerolíneas Argentinas S.A. y los hechos denunciados se habrían producido después de que el Estado Argentino retomara el control de esta última empresa en 2008. Embraer admitió, ante una denuncia de la Securities and Exchange Commission de los Estados Unidos, que está investigando presuntos hechos de corrupción en la venta de aviones en varios países, y no puede ignorarse que la operación con Austral ya generó una causa ante la Justicia , a cargo del juez Torres, porque el precio de los aviones supera en casi 5 millones de dólares al habitual. En este sentido, prontamente presentaré un pedido de informes al Poder Ejecutivo Nacional para que brinde todas las explicaciones pertinentes”, recordó Gil Lavedra.
“El gobierno debe brindar explicaciones inmediatas acerca de por qué Austral pagó 35 millones de dólares por aviones que Embraer suele vender a 30 millones. El entonces gerente financiero, Axel Kiciloff, justificó ese aumento en los presuntos servicios de mantenimiento y capacitación adicionales que proveería Embraer, pero resta saber en detalle en qué consisten estos servicios adicionales, que insumen más de 100 millones de dólares en total”, agregó el legislador.
“Embraer está llevando a cabo una investigación para determinar si existieron casos de corrupción, y es innegable que la operación con Austral presenta muchas sombras que deben ser aclaradas. Ambos casos requieren de la máxima celeridad por parte de la Justicia y del Gobierno Nacional, para desterrar cualquier atisbo de impunidad en hechos de corrupción de suma gravedad”, concluyó Gil Lavedra.